Los aceites vegetales son la base de la cosmética natural. Nutren, protegen, suavizan… y lo hacen sin químicos, ni rellenos, ni mentiras.
Pero no todos los aceites son iguales. Algunos son más ligeros, otros más nutritivos, y elegir el correcto para tu tipo de piel hace toda la diferencia.
Acá te dejo una guía simple y clara 💧
💧 Si tenés piel grasa o con tendencia al acné
Buscás aceites que regulen el sebo y no obstruyan poros:
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Jojoba: regula el sebo, muy parecido al sebo natural de la piel.
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Cáñamo: no comedogénico, antiinflamatorio.
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Avellana: astringente y seborregulador.
💧 Si tenés piel seca o deshidratada
Necesitás aceites más densos y nutritivos que aporten elasticidad:
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Argán: rico en vitamina E, regenera y suaviza.
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Almendras dulces: muy emoliente y suavizante.
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Manteca de karité (en bálsamos): ideal para zonas muy resecas.
💧 Si tenés piel sensible o reactiva
Buscás calmar, reparar y proteger:
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Caléndula (oleato): antiinflamatorio y regenerador.
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Maracuyá: liviano, calmante, rico en omega 6.
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Arroz: muy suave, buena opción para bebés y piel atópica.
💧 Si tenés piel mixta
Elegí aceites equilibrantes que hidraten sin exceso:
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Jojoba (otra vez): es ideal para balancear.
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Rosa mosqueta: regenera sin engrasar.
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Macadamia: textura sedosa, ideal para pieles mixtas y maduras.
📌 ¿Cómo se usan?
Podés aplicarlos:
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Directamente (en poca cantidad, sobre piel húmeda)
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Como parte de un sérum
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En bálsamos, mascarillas o emulsiones
Y también podés combinarlos según tus necesidades.
📝 Bonus: Clasificación comedogénica (simplificada)
Aceite | Comedogenicidad* |
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Jojoba | 0 |
Almendras dulces | 2 |
Coco | 4 |
Argán | 0–1 |
Rosa mosqueta | 1–2 |
*0 = no tapa poros; 5 = muy comedogénico